Entradas más populares
El último tango en París tiene mirada de felino.
Acrílico sobre lienzo 50x50 cm. El último tango en París. No juegues con mi cuerpo. No me utilices. No descargues en mí toda tu frustración. Puedo ser tan temible como la más astuta depredadora. Hay frío. Hay soledad. Vivimos en una vorágine de zarpazos. Lamo mis heridas como puedo. A veces creo que terminaré perdida para siempre. El río discurre lento. Siempre vigilante. Fue testigo de muchas muertes, pero se mantiene impasible. Todos vemos muertes y, a veces, creemos que es un sueño. Tú no tienes nombre y yo tampoco tengo nombre. No hay nombres. Aquí no tenemos nombre. (frase de la película). La pintura El último tango en París estuvo expuesta desde el 6 hasta el 29 de octubre de 2021 en el Centro Municipal de las Artes de la Concejalía de Cultura en Alicante. La exposición se tituló El color de la melodía. Leandro Barbieri es el autor de toda la banda sonora de la película El último tango en París realizada por Bernardo Bertolucci en 1972. Enlace a YouTube con el tema m
El azar no tiene respuestas.
¿Y si no hubiera salido de casa...? En 2020 escribí otro relato para ser publicado en la antología Palabras de Seda Fina. Una parte de la historia transcurre en Cuba durante los años ´80, en La Habana. Aunque en definitiva es un suceso intemporal. El entorno económico y social allí no ha cambiado, en todo caso se han recrudecido las penurias de la población. Hay otra parte del relato que narra una peligrosa huida por mar. Las travesías entre las costas de Cuba y los Estados Unidos en embarcaciones no adecuadas por su fragilidad son muy frecuentes. Muchos han muerto en el Estrecho de la Florida y muchos son devueltos a Cuba si son interceptados en el mar. Es la gran tragedia de la emigración irregular. Las razones para arriesgar la vida en un viaje sin garantías son variadas, pero en todas subyace el descontento, el afan de mejoras ec
Poema LXX
"Poema LXX." Acrílico s/lienzo 56x46 cm. "Estas son mis alegrías: las he contado, y creo que no falta ninguna. Llévalas todas a cantar en tus noches, o a perderse en tus mares, o a morir en tus labios. Estas son mis tristezas. Contarlas no he podido, pero sé que me siguen fielmente. Llévalas todas a abonar tu tierra, a ser la levadura de tu pan, la leña de tu lumbre. Esta soy yo: fundida con su sombra, entera y sin rasgos. Llévame a tu corazón, que peso poco y no tengo otra almohada ni otro sueño. "Poemas sin nombre", Dulce María Loynaz."
Comentarios